El sol se levanta como una mirada a la luna viajera y en medio de una sinápsis visceral desmesurada soy conciente que llevo un mes muerto. Me aferro a mi sueño y me niego a estar muerto. No quiero estar muerto...
Sólo el placer del calor corporal sin que sea propiamente una de las experiencias termodinámicas me separó del mundo de los sueños pero todavía no me atrevo a concluir nada acerca de mi posición en el mundo de los muertos...
Hoy por primera vez en mucho tiempo le tuve miedo a la muerte pero más que al hecho de morirme, le temo al hecho de no haberme dado cuenta.
"... An empty face and empty bones
Who ate your heart? ..."
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